La decisión del presidente de la Generalitat Valenciana y líder regional del PP, Francisco Camps, en torno a las implicaciones de responsables valencianos en elcaso Gürtel ha sido convocar una reunión del comité ejecutivo regional del PP para el martes, tras el puente del Día de la Hispanidad. Según reconocen fuentes del Partido Popular, el Comité Ejecutivo propondrá ese día el "cese temporal" de su secretario general, Ricardo Costa.
Este viernes, los actos del Nou d'Octubre, fiesta oficial valenciana que conmemora la toma de la capital por Jaime I en 1238, han estado marcados por la posible caída del secretario regional del PP valenciano, Ricardo Costa que, como pronto ha quedado aplazada al martes, cuando vuelva del Camino de Santiago. La práctica totalidad de los dirigentes y cargos públicos valencianos del PP opinan que Costa debe dimitir, según fuentes populares, y más de la mitad, que también debe hacerlo el vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla.
Insistencia
La dirección nacional del PP, y el propio líder del partido, Mariano Rajoy, ha venido insistiendo en los últimos tiempos ante Francisco Camps para que haga algún gesto. Precisamente sobre ese asunto versó la conversación entre Rajoy y Camps en el Parador de Alarcón celebrada el pasado 30 de septiembre, que acabó en unas extrañas tablas después que Rajoy le pidiese destituciones y el valenciano le repusiera que hará lo que mejor le parezca.
Máxima presión
Pero este viernes la presión parecía estar en su grado máximo. Por una parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid y regional del partido, Esperanza Aguirre, había expulsado del grupo parlamentario el día anterior a los imputados. Por otra, el responsable de Comunicación de la dirección nacional y en tiempos hombre de confianza de Camps, Esteban González Pons, sentenciaba el viernes en Valencia que el presidente tenía que "hacer algo o hacer algo", y añadía que la fiesta del Nou d'Octubre acababa a las cuatro de la tarde, con lo que parecía un anuncio de decisión inminente. Pasaron las cuatro y solo hubo el anuncio de la reunión del martes.
Confianza y lectura del acta
Antes de marchar al Camino de Santiago, el secretario general de los popularesvalencianos, Ricardo Costa, declaraba que había hablado varias veces en las últimas horas con el presidente Camps y este le había reiterado la confianza en su persona y su gestión, con lo que parecía descartar que sea inminente su renuncia. Desde que se hicieron públicas las nuevas revelaciones sobre el informe policial en torno al caso Gürtel, Costa se ha venido resistiendo a dejar el cargo y ha insistido en que en todo caso, también debía dimitir el vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla.
Sin portavocía
El viernes la renuncia de Costa parecía inminente, pero el hecho de que la reunión de la dirección haya sido fijada para el martes no deja muy claro que se haya de producir entonces. Aunque todo apunta a que se producirá ese día. En cuanto a Rambla, que en la última remodelación del Consell de la Generalitat de final de agosto pasado perdió su condición de portavoz, fue el viernes el encargado de conducir el acto protocolario del Nou d'Octubre y de leer el acta de concesión de las altas distinciones de la Generalitat que se otorgan con carácter anual.
Los trajes
Como era previsible, el presidente Camps no hizo alusión alguna al caso Gürtel en el discurso institucional que leyó en el Saló de Corts el Palau de la Generalitat. No obstante, algunas de sus palabras fueron interpretadas en clave de partido en el sentido de reclamar la capacidad de decisión con independencia de Madrid: "Reivindicamos nuestro derecho a liderar nuestro futuro, sin cortapisas y reconociendo lo que es justo", dijo Camps. Y probablemente sin pretenderlo dio pie a las bromas sobre el asunto de los trajes cuando, al destacar los méritos de los valencianos como pueblo, dijo: "Nadie nos ha regalado nada y nadie nos puede arrebatar lo que ya hemos conseguido".
"Entre la inercia y la Providencia"
No obstante, la de González Pons no ha sido la única alusión de dirigentes populares a la toma de medidas. Algunos de ellos, como la alcaldesa de Valencia, Rita Barbarà, o el vicepresidente tercero del Consell, Juan Cotino, también habían hecho alusiones que se interpretaron como anuncio de inminentes renuncias que no se produjeron. Y por su parte, el secretario general del Partit Socialista del País Valencià-PSOE, Jorge Alarte, aprovechaba la festividad para leer un manifiesto en el que los socialistas reiteran que Camps debe dimitir y convocar elecciones anticipadas.
La opinión de Alarte
"La incapacidad del presidente Camps, de su Gobierno y del Partido Popular de dar una respuesta democrática a la grave crisis institucional, política y económica que atravesamos exige la inmediata convocatoria de elecciones anticipadas en la Comunitat Valenciana", dijo Alarte.
La Providencia
"Los ciudadanos han de expresar su voluntad democrática ante la relevancia de los acontecimientos de los que están teniendo noticia. No es posible que defiendan nuestros sueños colectivos quienes culpablemente viven atrapados en su propia pesadilla". Mientras, Camps decidía continuar, al menos hasta el martes, con su tradicional manera de actuar, que es dejar que las cosas se resuelvan "entre la inercia y la Providencia", como dice con ironía algún miembro del partido.
Con respecto a todo esto de la trama Gürtel y de los sinvergüenzas de nuestros políticos (sean del partido que sean) me gustaría invitarte a leer mi último artículo:
ResponderEliminar"NO ES PAÍS PARA HONRADOS"
http://www.terceraopinion.net/2009/10/11/no-es-pais-para-honrados/
Un saludo.